Por Carlos Uhart M.
La alternativa de productos de inversión crece día a día permitiéndole a cualquier persona invertir sus activos en diversos tipos de operaciones financieras o de trading según su nivel de experiencia y capital.
Como muchos ya saben, al realizar operaciones de trading por lo general el riesgo es mucho mayor al de una inversión a mediano o largo plazo, ya que lo que se busca es justamente maximizar el rendimiento de la inversión en el corto plazo, una ecuación que suele seguir tendencias contrapuestas.
Es justamente esta la razón por la que originalmente nacen lo que hoy conocemos como productos u operaciones financieras apalancadas, las cuales permiten el acceso a operaciones en mercados en donde anteriormente el volumen del dinero disponible no era suficiente para operar.
Definición de apalancamiento
En palabras simples apalancar es la acción de apoyarse en algo para incrementar los resultados en base a un menor esfuerzo que si lo hiciéramos en una condición de equilibrio individual.
En física clásica, la palanca es una máquina simple cuya función consiste en amplificar la fuerza mecánica aplicada a un objeto, para incrementar su velocidad o distancia recorrida.
Su referencia más antigua la podemos encontrar en un manuscrito que forma parte de la colección matemática de Pappus de Alejandría, una obra en ocho volúmenes que se estima fue escrita alrededor del año 340 DC, en donde aparece la famosa cita de Arquímedes:
Dadme un punto de apoyo y moveré el mundo.
En el ámbito financiero empresarial se denomina apalancamiento a la estrategia utilizada para incrementar las utilidades de tal forma que estas superen los márgenes que se obtendrían tan sólo con capitales propios.
A partir de aquí podemos observar dos tipos principales de apalancamiento:
1. Apalancamiento operativo
Consiste en utilizar costes fijos para obtener una mayor rentabilidad por unidad vendida, es decir, es relación entre costes fijos y costes variables utilizados por una empresa en la producción de bienes.
2. Apalancamiento financiero
Consiste en utilizar deuda para aumentar la cantidad de dinero que podemos destinar a una inversión. Es la relación entre capital propio y crédito utilizado en una operación financiera.
Vamos a concentrarnos en este último.
¿Qué es un apalancamiento financiero?
Para entenderlo mejor analicemos el funcionamiento del apalancamiento en el trading, que es aquel servicio que un intermediario financiero (broker) ofrece a sus clientes realizando un préstamo de capital para completar el monto necesario para abrir su operación.
Mirando un poco más allá este ejemplo clásico, algunos de los productos apalancados más reconocidos en la actualidad son los «Contratos por Diferencia» o CFD (Contract for Difference), los cuales podrían definirse como:
Un CFD es un contrato mediante el cual dos partes acuerdan intercambiar la diferencia entre el precio de entrada y el precio de salida del activo subyacente sobre el que se ha establecido el CFD.
Otro tipo de producto apalancado muy popular el día de hoy es el ofrecido por los exchange de criptomonedas, los cuales permiten acceder a una posición de compra en base a un complemento de capital propio y del exchange.
Cómo funciona el apalancamiento financiero
El grado de apalancamiento se suele medir en unidades fraccionadas, por ejemplo, un apalancamiento de 1:2 significa que por cada peso propio invertido se están invirtiendo dos pesos, ósea, la deuda también es de 1 peso.
Por consiguiente, un apalancamiento 1:3 es aquel en que por cada peso propio se están invirtiendo 3 pesos, ósea, hay dos pesos de deuda.
El capital propio corresponde a un 33% de la inversión.
Por ejemplo, si invertimos $1.000 pero el valor final de nuestra inversión es de $10.000, el apalancamiento sería 1:10.
Cuando el apalancamiento financiero es resultado de deuda se suele utilizar esta otra fórmula para calcular el porcentaje de apalancamiento que estamos utilizando:
1. Apalancamiento financiero con ganancias
Disponemos por ejemplo de $10.000 y pedimos al banco un crédito por $90.000 para comprar 100.000 acciones a $1 cada una.
Luego de un tiempo, la acciones suben a $1,5 por acción, por lo que nuestras 100.000 acciones pasan a valer $150.000 y decidimos venderlas.
Con estos $150.000 pagamos los $90.000 del banco más $10.000 por intereses, con lo cual nos queda:
Resultado final: 150.000 – 90.000 – 10.000 = $50.000
Es decir, sin contar los $10.000 iniciales, obtenemos beneficios de $40.000, es decir una rentabilidad del 400%.
Si no hubiésemos utilizado apalancamiento y las acciones hubiesen subido a $1,5 nosotros hubiésemos ganado $5000, la mitad nuestro capital inicial.
2. Apalancamiento financiero con pérdidas
Al igual que en el ejemplo anterior, disponemos de $10.000 y pedimos al banco un crédito por $90.000 para comprar 100.000 acciones $1 cada una.
Luego de un tiempo, la acciones caen a $0,5 por acción, por lo que nuestras 100.000 acciones pasan a valer $50.000.
Resultado final: 50.000 – 90.000 – 10.000 = $50.000
En este punto ya no podemos ni siquiera hacer frente a los $90.000 del banco, más los $10.000 de intereses, por lo que acabaremos adquiriendo una deuda de $50.000, a la que si sumamos los $10.000 iniciales nos queda en una perdida de $60.000.
Si no hubiésemos utilizado apalancamiento y las acciones hubiesen bajado un 50%, nosotros hubiésemos perdido $5000, la mitad nuestro capital inicial.
Oportunidades y riesgos
En general, las oportunidades que otorga el apalancamiento tienen que ver con el acceso que ofrece el bróker a la apertura de operaciones que la persona por si sola no podría realizar, pero en donde también es libre de escoger cual es el tipo de operación que va a a realizar y establecer los montos del contrato por diferencias.
Con respecto a los riesgos o amenazas, lo que hay que entender primero es lo referente al margen, es decir cual es el monto requerido en este caso por el bróker o intermediario financiero a fin de protegerse en caso de pérdida, lo cual suele ser un porcentaje calculado con función del valor de la posición
Sin duda, el mayor riesgo asociado a los productos financieros apalancados es lo que se conoce como «llamada de margen», que es básicamente el margen de operación que el bróker establece con el objetivo de limitar perdidas del trading, en caso que el porcentaje del margen este por debajo sus límites aceptados.
Por último y no menos importante es el volumen del contrato de operación, ya que al ser el CFD un derivado financiero que va en la línea de otro activo subyacente, para abrir la operación apalancada se necesita definir el tamaño de la operación, lo que se conoce como «lotaje».
En trading, se emplea el término lotaje para designar el tamaño de una operación. El origen del término está en la definición clásica de “lote”, que refiere a un conjunto de unidades similares y agrupadas.
Ahora bien, hay que ser muy cuidadoso en este punto, ya que mientras mayor sea el lotaje, mayor será el capital dispuesto por el bróker para iniciar tu operación, pero ante una posición en contra, esto podría afectar seriamente tu margen y cerrar la operación.
Consideraciones sobre las operaciones apalancadas
Como hemos visto, las operaciones apalancadas son de muy alto riesgo, pero los beneficios que se pueden obtener de ellas son también considerables.
Para evitar lo sucedido en el ejemplo anterior, es necesario tener un muy buen control de las operaciones que se realizan, evitando tener margen en varias operaciones sobre un mismo escenario.
En este punto debemos entender que una de las principales herramientas utilizadas en las operaciones de trading es la que se conoce como «Stop Loss», es decir, cual es el límite de pérdida que se está dispuesto a asumir sobre una operación.
Una orden Stop Loss (detener pérdidas) es una orden bursátil que se queda en espera hasta que el precio del subyacente (una acción por ejemplo) llega a un precio objetivo fijado por el inversor. En ese momento se activa y manda al mercado la orden de compra o venta introducida, dependiendo si la operación inicial era de compra (posición larga) o de venta (posición corta).
Hay que tener en cuanta que los brokers que ofrecen alternativas apalancadas, deben estar regulados en el entorno de la operación, de esta forma evitaremos cualquier inconveniente asociado a operaciones irregulares.
Conclusiones finales
El apalancamiento sin duda es una opción valida al momento de realizar trading, pero que tienes sus propios riesgos y oportunidades inherentes a sus características y forma de operación.
Lo más importante acerca de su uso es obtener inicialmente un entendimiento adecuado de lo que se va a realizar, buscar ayuda o asesoría confiable y ser muy consciente de los riesgos que se están asumiendo.
Conceptos claves como gestión del riesgo, control de las operaciones, autocontrol emocional, limites de perdida (stop loss) serán muy importantes al momento de realizar operaciones de este tipo de forma exitosa.