Por Binance Academy
El trading (comercio en inglés) es un concepto económico fundamental que implica la compra y venta de activos, que pueden ser bienes y servicios, en los que el comprador remunera al vendedor.
Mientras que en otro casos, la transacción puede consistir en un intercambio de bienes y servicios entre las partes que intervienen en el trade.
En el contexto de los mercados financieros, los activos tradeados son denominados instrumentos financieros.
Éstos pueden ser valores, bonos, pares de divisas del mercado Forex, opciones, futuros, productos con margen, criptomonedas y muchos otros.
El término «trading» habitualmente se utiliza para referirse al trading a corto plazo, en el que los traders, de forma activa, entran y salen de sus posiciones en intervalos de tiempo relativamente cortos.
Sin embargo, esta referencia puede ser poco precisa, ya que trading puede aludir a un amplio rango de estrategias diferentes, como por ejemplo el «day trading», «swing trading», «copy trading» y muchos otros.
Cómo definimos una inversión
Invertir es asignar recursos (capital por ejemplo) con la expectativa de generar un beneficio. Aquí se puede incluir el uso de dinero para financiar y poner en marcha un negocio, o comprar tierras con el objetivo de venderlas posteriormente a un precio más elevado.
En los mercados financieros, esto habitualmente implica invertir en instrumentos financieros con la esperanza de venderlos más tarde a un precio más elevado.
La expectativa de obtener un retorno (ROI) es un aspecto esencial de la inversión, pero a diferencia del trading, las inversiones habitualmente adoptan un enfoque más a largo plazo en relación con la acumulación de valor.
El objetivo de un inversor es generar riqueza a lo largo de un periodo de tiempo prolongado (años o incluso décadas) y existen muchas maneras de hacerlo, pero los inversores normalmente emplean factores fundamentales para encontrar oportunidades de inversión potenciales.
Dada la naturaleza a largo plazo de su enfoque, los inversores habitualmente no se preocupan por las fluctuaciones del precio a corto plazo.
Por tanto, normalmente se mostrarán relativamente pasivos, sin preocuparse demasiado por las pérdidas a corto plazo.
Cuál es la diferencia entre tradear vs. invertir
Tanto los traders como los inversores buscan generar beneficios en los mercados financieros. Sus métodos para alcanzar dicho objetivo, sin embargo, son bastante distintos.
Generalmente, los inversores buscan generar un retorno a lo largo de un periodo de tiempo más prolongado – digamos que en años o incluso décadas.
Al tener un horizonte temporal más largo, el retorno que éstos se marcan como objetivo para cada una de sus inversiones tienden a ser también más grande.
Los traders, en cambio, tratan de aprovecharse de la volatilidad del mercado. Entran y salen de sus posiciones de manera más frecuente y es posible que busquen retornos más pequeños para cada trade ya que a menudo entran en múltiples de ellos.
¿Qué enfoque es mejor? ¿Cuál es el más adecuado para ti? Eso es algo que debes decidir tú. Puedes empezar informándote sobre los mercados y luego aprender practicando.
Con el tiempo, podrás determinar cuál de ellos se adapta mejor a tus objetivos financieros, personalidad y perfil de trading.
Qué es el análisis fundamental (AF)
El análisis fundamental es un método para calcular la valoración de un activo en base a factores económicos y financieros, para determinar si el valor de un activo es justo.
Los mismos pueden incluir condiciones macroeconómicas, como por ejemplo el estado general de la economía, industria o negocio vinculado con el activo (si es que lo hay).
Una vez concluido el análisis fundamental, los analistas se proponen determinar si el activo se halla infravalorado o sobrevalorado. Los inversores pueden emplear dicha conclusión a la hora de tomar sus decisiones de inversión.
En el caso de las criptomonedas como el Bitcoin, el análisis fundamental también puede incluir un campo emergente de la ciencia de datos que se ocupa de los datos de las blockchains públicas, denominado on-chain metrics.
Dichas métricas pueden incluir la tasa de hash (hash rate), los principales holders, el número de direcciones, el análisis de las transacciones y muchas otras cosas.
A partir de la gran cantidad de datos disponibles en las blockchains públicas, los analistas pueden crear complejos indicadores técnicos, que miden ciertos aspectos de la salud general de la red.
Mientras el análisis fundamental se utiliza ampliamente en el mercado de valores o Forex, es menos apropiado para las criptomonedas en su estado actual.
Dicha categoría de activos es tan nueva que, sencillamente, no existe un marco estandarizado y exhaustivo para determinar las valoraciones de mercado.
Más importante aún, el mercado se ve principalmente dirigido por la especulación y las narrativas.
Por ello, los factores fundamentales habitualmente tendrán un efecto insignificante sobre el precio de una criptomoneda.
Sin embargo, formas más precisas de pensar en la valoración de criptoactivos podrían ser desarrolladas en cuanto el mercado madure.
Qué es el análisis técnico (AT)
Los analistas técnicos operan con un enfoque distinto ya que la idea principal subyacente es que el histórico del precio de la acción puede indicar de qué manera es probable que el mercado se comporte en el futuro.
Los analistas técnicos no intentan averiguar el valor intrínseco de un activo, sino que observan el historial de la actividad de trading y en base a él tratan de identificar oportunidades.
Esto puede incluir el análisis de la acción del precio y volumen, patrones gráficos, indicadores técnicos y muchas otras herramientas chartistas. El objetivo de dicho análisis es evaluar la fortaleza o debilidad de un mercado concreto.
Dicho esto, el análisis técnico no es sólo una herramienta para predecir la probabilidad de futuros movimientos del precio. También puede resultar un esquema útil para la gestión del riesgo.
Al proporcionar un modelo para analizar la estructura del mercado, el análisis técnico hace que la gestión de los trades sea más precisa y cuantificable.
En este contexto, medir el riesgo es el primer paso para gestionarlo. Es por dicho motivo por el que algunos analistas técnicos pueden no ser considerados, estrictamente, traders.
Y es que es posible que sólo empleen el análisis técnico como un marco para la gestión del riesgo.
La práctica del análisis técnico puede ser aplicada a cualquier mercado financiero y es ampliamente utilizada entre los traders de criptomonedas. ¿Pero de veras funciona el análisis técnico?
Como hemos mencionado anteriormente, la valoración de los mercados de criptomonedas se ve en gran medida determinada por la especulación.
Esto hace que los mismos sean un terreno de juego ideal para los analistas técnicos, ya que estos últimos podrán prosperar teniendo en cuenta solamente factores técnicos.
Cuál tipo de análisis es mejor
Este concepto a menudo se denomina confluencia. Los traders de confluencia combinan múltiples estrategias en una sola, intentando sacar partidos de todas ellas.
La idea subyacente es que las oportunidades de trading presentadas por la combinación de estrategias serán más sólidas que las proporcionadas por una única estrategia.
¿Qué es lo que mueve los mercados financieros?
El precio de un activo se ve determinado, simplemente, por el equilibrio de la oferta y la demanda. En otras palabras, es decidido por los compradores y vendedores.
Allí donde la oferta y la demanda se encuentran, hay un mercado. ¿Pero qué otros elementos pueden impulsar el valor de un activo financiero?
Como hemos explicado anteriormente, puede haber factores fundamentales, como por ejemplo el estado de la economía.
Además, pueden intervenir factores técnicos como la capitalización de mercado de una criptomoneda. Y también es posible que haya otros factores a considerar, como el sentimiento de mercado o noticias recientes.
Sin embargo, los mismos no son más que eso, factores a considerar ya que lo que realmente determina el precio de un activo en un momento dado es, sencillamente, el equilibrio entre la oferta y demanda.
¿Qué es una tendencia de mercado?
Una tendencia de mercado es la dirección general hacia la que se dirige el precio de un activo. En el análisis técnico, las tendencias de mercado se identifican, habitualmente, utilizando la acción del precio, líneas de tendencia o, incluso, medias móviles clave.
Generalmente, existen dos tipos de tendencias de mercado principales: mercado alcista (bull) y bajista (bear).
Un mercado alcista comporta una tendencia al alza sostenida -en la que los precios suben de forma continua.
Un mercado bajista implica una tendencia a la baja sostenida, en la que los precios caen de manera continua.
Asimismo, también podemos identificar mercados en consolidación o “lateralizados”, en los que no hay una tendencia direccional clara.
Vale la pena destacar que una tendencia de mercado no equivale a que el precio vaya a moverse siempre en la dirección marcada por la misma.
Un mercado alcista prolongado contendrá pequeños mercados bajistas, y viceversa. Ésta es, sencillamente, la naturaleza de las tendencias de mercado.
Se trata de una cuestión de perspectiva, ya que todo depende del intervalo temporal en que te estés fijando. En intervalos temporales largos, las tendencias de mercado siempre serán más significativas que en los más cortos.
Un aspecto peculiar de las tendencias de mercado es que sólo pueden ser determinadas con absoluta certeza a posteriori.
Es posible que hayas oído hablar del concepto de «sesgo o prejuicio de retrospectiva» que alude a la tendencia de la gente de convencerse de haber sido capaces de predecir de manera precisa un acontecimiento, antes de que éste haya tenido lugar.
Como imaginarás, el prejuicio de retrospectiva influye notablemente en el proceso de identificar tendencias de mercado y en la toma de decisiones de trading.
¿Qué es un ciclo de mercado?
Es posible que hayas oído alguna vez la frase de que “el mercado se mueve por ciclos”. Un ciclo es un patrón o tendencia que emerge en momentos distintos.
Normalmente, en intervalos temporales prolongados, los ciclos de mercado son más fiables que en los más cortos.
No obstante, es posible que eventualmente descubras pequeños ciclos de mercado en gráficos de una hora, tal como puedes hacerlo al analizar décadas de datos.
Los mercados son cíclicos por naturaleza. Los ciclos pueden llevar a que ciertas categorías de activos presenten un mejor rendimiento que otras.
En otros segmentos del mismo ciclo de mercado, estas mismas categorías de activos pueden presentar un rendimiento peor que otras debido a diferentes condiciones del mercado.
Cabe señalar que es prácticamente imposible determinar en cualquier momento dado, el lugar en que uno se encuentra actualmente dentro de un ciclo de mercado.
Dicho análisis sólo puede ser llevado a cabo con elevada precisión después de que parte del ciclo haya concluido.
Además, los ciclos de mercado raramente presentan puntos de inicio y final concretos.
Así que al final, situarse en el momento presente lleva aparejada una perspectiva excepcionalmente sesgada de los mercados financieros.