Código QR

Los códigos QR están por todas partes como una manera conveniente de almacenar y distribuir información, al tiempo que son rápidamente accesibles para cualquier persona en múltiples dispositivos.

El uso de estos códigos 2D (bidis) es muy amplio. Puedes encontrarlos impresos en el embalaje de un producto; en una tarjeta de visita; en la mesa de un restaurante; en un supermercado; en un museo; en el campo de las monedas criptográficas; en anuncios publicitarios o en medicina para información de determinadas enfermedades y en los últimos tiempos incluidos en los «pasaporte COVID».

A continuación repasaremos aspectos sobre su creación y motivaciones, sus usos más generales, acceso y también la forma de crear tus propios códigos QR.

¿Qué es un código QR?

Un código QR es en palabras sencillas un «código de respuesta rápida» (Quick Response code) y fueron desarrollados como un salto evolutivo de los también muy conocidos códigos de barra, motivados por la necesidad de aumentar la cantidad de información y posibilidades de uso.

Originalmente los códigos QR fueron creados en Japón en 1994 por una subsidiaria del fabricante de autos Toyota y se extendieron rápidamente por todo el país.

Finalmente, en junio del 2000, fue aprobado el estándar internacional ISO que hoy se usa masivamente en todo el mundo, llegando a convertirse en el código 2D más utilizado.

Como cualquier otro código de barras, un QR tiene el objetivo de almacenar información en una etiqueta óptica legible por algún tipo dispositivo y para ello incluyen una matriz de puntos bidimensionales en formato cuadrado comúnmente en blanco y negro, con un cuadrados en tres de las esquinas que permiten al lector detectar la posición de lectura.

Estructura Código QR

La capacidad de información que pueden incluir un código QR está definida por niveles según la cantidad de módulos que forman la matriz.

Estos van desde el nivel I con 21 x 21 módulos hasta el nivel 10 que puede incluir hasta 177 x 177 módulos.

Los códigos QR más extendidos para su uso en consumo son los de 25 x 25 y 29 x 29, ideales por su equilibrio entre tamaño y capacidad almacenar información.

Aunque la gran mayoría de módulos se forman en colores blanco y negro, la norma admite cierta flexibilidad como para añadir otros colores.

En estos casos, los colores deben guardar un contraste suficiente entre claro y oscuro para que continúe siendo legible para los sistemas y programas de lectura de los códigos tradicionales.

Los códigos QR también pueden incluir toques gráficos para hacerlos más atractivos y personalizados, como por ejemplo imágenes de la persona en una tarjeta de visita.

También pueden ser utilizados para servir como registro advertencia de enfermedades o alergias que pueden ser leídos por sanitarios o fuerzas de seguridad en casos de accidente o emergencia.

¿Para qué sirven los códigos QR?

Los códigos QR, al ser capaces de almacenar diferentes tipos de información, se utilizan para múltiples propósitos, entre los que encontramos:

  • Como texto simple, por ejemplo para mensajes de bienvenida.
  • Direcciones personales o comerciales.
  • Números de teléfono.
  • Direcciones de correo electrónico
  • URL con direcciones de sitios web.
  • Vínculos a tiendas de aplicaciones
  • Cuentas bancarias o tarjetas de crédito.
  • Autenticación de cuentas en línea.
  • Autenticación Wi-Fi.
  • Claves de acceso de verificación de dos pasos (2FA).
  • Menús de un restaurante.
  • Direcciones virtuales de criptomonedas.

¿Cómo se utilizan los códigos QR?

Originalmente en Japón los códigos QR fueron utilizados para registrar los repuestos en una fábrica de automóviles, pero hoy son masivamente utilizados en todo tipo de industrias para gestión del inventario, marketing, servicio al cliente o simplemente como identificación.

Sin embargo, la inclusión de software capaz de leer códigos QR y la explosión de ventas de teléfonos móviles, ha conseguido que su uso en consumo sea también masivo.

Ahora bien, sin duda la pandemia del coronavirus ha sido probablemente su mayor impulsor, con usos desde identificar «pasaportes COVID» o simplemente para digitalizar los menús de un restaurante, evitando el contacto físico entre personas y objetos.

Si en sus inicios necesitaban dispositivos industriales fijos o de mano para leer los códigos, hoy se pueden usar casi cualquier aparato electrónico que posea una cámara.

¿Cómo generar un código QR?

Las posibilidades de uso de los códigos QR son prácticamente infinitas y es por eso que existen distintas plataformas y herramientas para crear tu propio QR fácilmente como QRTY, una de las más sencillas.

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